Óscar Clavell, diputado nacional PPCS
1978 fue un gran año. España entraba de lleno en la democracia y, con absoluta generosidad, los españoles se dieron la mano y miraron al futuro para construir un país en libertad. El 6 de diciembre de 1978, los españoles votaron en referéndum la Constitución y el sí venció de forma abrumadora.
Esta semana hemos celebrado el 40 aniversario del marco legal que desde 1978 nos ampara y defiende como pueblo español. Sin lugar a dudas, han sido las cuatro mejores décadas de la historia de España en economía, políticas sociales y medioambientales y, especialmente, en derechos y libertades.
Los que hemos nacido en democracia hemos tenido la suerte de vivir en la época más próspera. La Constitución nos igualó a todos y fijó el marco de convivencia que necesitamos para construir el gran país que somos ahora.
Siete hombres, que representando a diferentes ideologías y formas de pensar, fueron capaces de aparcarlas y elaborar un texto que nos uniese y representase a todos con el principal objetivo de no enfrentar a nadie, pero sí con el deseo de aglutinar a todos.
La Constitución Española supo dejar el pasado, sin olvidarlo para no caer en aquellos errores, pero con la vista puesta en el presente para construir un futuro mejor para las generaciones venideras.
Pero lamentablemente aquel esfuerzo realizado por gente que iba desde la derecha al comunismo pasando por el centro de la UCD, el socialismo o los nacionalistas no rupturistas se ha visto empañado por gente que ya nacida en plena democracia reniega de aquel trabajo en común que hizo de España un país libre y democrático.
Esta gente que hoy no acepta los resultados electorales, que llama a ocupar la calle cuando no le interesa la voluntad soberana del pueblo o que simple y llanamente pretende dinamitar aquel consenso que facilitó la concordia y hermandad de todos los españoles.
Desconozco si algún día las nuevas generaciones podrán estar tan orgullosas de nosotros como lo estamos ahora de aquellas personas que nos dejaron el mejor legado que pudieron hacer.
Gracias a Herrero de Miñón, Pérez Llorca, Cisneros, Solé Tura, Peces Barba, Fraga y Roca.
Por ellos siete, los padres de la Constitución, pero también por toda España, feliz 40 aniversario y por muchos más.
